5 novelas románticas sobre el ballet
Actualizado: 21 sept 2021
El mundo del ballet parece idóneo para el desarrollo de una novela romántica. Los lectores de la serie Oak Hill sabéis que Rebecca Miller, la protagonista de la segunda entrega, Regreso a Oak Hill, es bailarina y, aunque el ballet no es el tema principal del libro, es una parte importante de mi protagonista más imperfecta. Ya os hablé el otro día de algunos bailes que inspiraron las actuaciones de Rebecca en la novela, pero hoy no vengo a hablaros de mis escritos, sino de otras bailarinas de la novela romántica (y algún bailarín).
¿Qué tiene el mundo del ballet para convertirse en el marco perfecto para un apasionado romance? Tal vez la elegancia, fuerza y sensibilidad de los bailarines, la dureza de un mundo que exige entrega y sacrificio, pero que también aporta una gran satisfacción personal y un elevado desarrollo artístico. Un universo ideal para desarrollar todo tipo de emociones, desde la pasión hasta la envidia, o para interponer numerosos obstáculos a los amantes.
He seleccionado cinco novelas que giran en torno a la danza clásica, aunque, por supuesto, la lista podría ser mucho más larga.
Cleo pide un deseo, de Anna Casanovas
Cleo es una bailarina del Liceo de París que ejerce de madre soltera con su sobrina y cree estar enamorada de su mejor amigo. Pero Daniel, el brillante y mujeriego director de orquesta, no parece verla como mujer. La llegada de Sergio, amigo de Daniel, desata una inesperada reacción en Cleo, poco acostumbrada a dejarse gobernar por las pasiones. Desde ese momento, Cleo se ve sumergida en una espiral de dudas, porque se debate entre los sentimientos que hace años tiene por Daniel y la intensa atracción que le provoca Sergio, un periodista acostumbrado a vagabundear por el mundo y que, de repente, se cuela en la vida de Cleo y no parece dispuesto a marcharse.
Se trata de una novela corta, apenas un centenar de páginas, con todas las características de Anna Casanovas: una historia sencilla, casi cotidiana, que enmarca un amor épico, relatada con elegancia y sobriedad. Una narración impecable a la que no le sobra ni le falta nada y que emociona y divierte a partes iguales.
La danza de los sueños, de Nora Roberts
De las novelas de este listado, este título de Nora Roberts es la que más se sumerge en las rutinas de una bailarina profesional y explora las luces y las sombras del mundo de la danza clásica. Ruth Bannion, primera bailarina de una compañía neoyorkina, y Nickolai Davidov, bailarín principal y director artístico de la agrupación, son dos personajes fuertes, luchadores y con una clara idea de sus metas y sus prioridades. El ballet es el centro de su existencia, pero el amor irrumpe con una fuerza avasalladora que todo lo trastoca.
Sin embargo, mientras su historia de amor crece, el lector se adentra en los entresijos del mundo de la danza clásica: sus extenuantes ensayos, los grandes sacrificios personales, el amor por un arte sin el que ninguno de los bailarines sabe vivir, la envidia entre compañeros, la lucha encarnizada por los papeles principales, los lazos de amistad y lealtad, la fortaleza y dedicación de los bailarines, la obsesión por la delgadez, la preocupación por el futuro en una carrera inevitablemente corta…
Un libro breve, pero intenso, con dos protagonistas magníficos que desnudan ante el lector sus ambiciones, miedos e inseguridades, pero también su inmensa capacidad para amar, la fortaleza de sus caracteres y su dedicación absoluta a aquello que verdaderamente les importa.
Saga Eloisse, de Claudia Velasco
Debo empezar diciento que, aunque Claudia Velasco es una autora que me encanta y tiene libros maravillosos, como Spanish Lady o La princesa del millón de dólares, tengo que señalar que esta bilogía no es mi favorita de los libros de Claudia. Las relaciones tóxicas, que tan de moda están desde hace unos años, no me parecen románticas y no me suelen gustar los libros que tratan esta temática. Sin embargo, es la primera novela que leí con una protagonista bailarina, tiene el impecable estilo de Velasco (bien escrita, personajes inmejorablemente construidos y un buen ritmo narrativo) y solo por eso considero importante incluirla en este listado, al margen de que la historia no me gustara.
Alrededor de tu piel y Me miraré siempre en tus ojos cuentan la historia de amor entre Eloisse Cavendish y Ronan Molhoney, una bailarina y un cantante de rock, tan diferentes entre sí como sus profesiones. Ambos viven una relación intensa, marcada por la pasión, pero también por los celos, la inseguridad, el engaño, la fama, la exposición pública y sus exigentes carreras profesionales.
Una vida en París, de Erika Fiorucci
De la mano de Sergei Petrov, uno de los personajes más interesantes creado por Erika Fiorucci, nos adentramos en la vida de una gran estrella del ballet. Petrov es un secundario de lujo en Cuatro días en Londres y Tres días en Moscú, de esos secundarios que roban el plano una y otra vez. Un personaje complejo que pedía a gritos su propia novela y le llegó el turno del protagonismo absoluto con Una vida en París.
En sus anteriores novelas, Erika nos mostró a un personaje contradictorio. Un hombre encantador y divertido, que a menudo tenía que ser rescatado de sus propias debilidades. Un hombre capaz de traicionar a su mejor amigo y destruir las vidas de las personas que ama y, al mismo tiempo, capaz de ser el más leal y generoso de los amigos. El chico malo del ballet, que puede presentarse borracho en una actuación o dejar colgado un ensayo sin avisar, y también el único que puede ofrecer el más bello espectáculo sobre el escenario.
En Una vida en París, Sergei se está dando la oportunidad de crearse una nueva vida, de tomar distancia de todo lo que rompió en el pasado y demostrarse que puede cuidar de sí mismo. Pero la soledad pesa demasiado y, de vez en cuando, recae en alguno de sus viejos hábitos, aunque cada vez con menos frecuencia y más renuencia. En su aventura parisina, le acompañan una mágica tatuadora que juega al hada madrina, una pianista serena y equilibrada con demasiadas cargas a sus espaldas, una adolescente que aspira a ser bailarina y un ambiguo hombre de negocios que no parece tener en mucha estima al bailarín. Todos los personajes giran en torno a un Sergei que madura poco a poco, a medida que va descubriendo lo que verdaderamente quiere de la vida, deja atrás sus hábitos autodestructivos y se entrega de lleno a las personas que ama.
Una historia dulce y sencilla, menos intensa que las anteriores entregas de la serie, pero también más madura a todos los niveles, con un protagonista complejo y carismático que crece página a página y que enamora con su irresistible encanto.
Como veis, los bailarines clásicos y el universo que los rodea parecen el marco perfecto para una apasionada historia de amor. ¿Conocéis alguna otra novela romántica sobre el mundo del ballet?
¡Hola! Muy interesante el post: aprovecho para anunciar que el próximo 9 de mayo se publica mi tercera novela, La danza de París, de corte histórico y romántico con el ballet Giselle como telón de fondo. Un saludo y enhorabuena por el blog.