Serie recomendada: "Peaky Blinders"

Llevo un tiempo sin aparecer por aquí y ya lo echaba de menos. Os estoy preparando un post de lecturas para las vacaciones, pero mientras lo acabo he querido recomendaros una serie que me ha gustado mucho y que me ayudó a pasar un pequeño bloqueo lector que tuve a principios de la primavera. La he comentado un poco en redes, pero el blog me permite profundizar más en el tema. Así que hoy, en vez de libros, os recomiendo contenido audiovisual. Cambia el lenguaje, pero el propósito es el mismo: contar historias.

Peaky Blinders: una serie redonda

Muchos ya habréis visto Peaky Blinders, drama británico producido por la BBC que relata la historia de los Shelby, una familia mafiosa en la Inglaterra de los años 20. Me la recomendó una amiga en cuyo criterio confío, así que le di una oportunidad y resultó todo un descubrimiento. La vi a principios de la primavera y estuve un tiempo con resaca televisiva; durante semas tuve la cabeza llena de extorsiones, apuestas ilegales, violencia callejera, luchas entre bandas y una familia turbia con hambre de poder.

La serie se adentra en los bajos fondos de Birmingham tras el fin de la Primera Guerra Mundial. La contienda ha dejado en los hombres que volvieron terribles secuelas físicas y psicológicas, tal como veremos a menudo en la serie, que refleja muy bien los traumas que arrastraron los ex combatientes.

Los tres hermanos Shelby, que participaron en la guerra, volvieron a casa para retomar el control de la banda callejera que dirigían antes de irse y que, durante el conflicto, quedó a cargo de su tía Polly, una mujer tan dura como sus sobrinos, que ha gobernado en su ausencia los bajos fondos.

Thomas Shelby: el violento príncipe de Birmingham

A su regreso de la guerra, el mando de la familia recae en el segundo de los hermanos, el implacable y astuto Thomas, que se come la pantalla con su sola presencia. Controlador, frío e inteligente, es la perfecta representación de un jefe de la mafia, al que sin embargo no le faltan debilidades (pero no las cuento por si no habéis visto la serie y os apetece darle una oportunidad).

El carismático Thomas es el eje y el motor de Peaky Blinders, un personaje redondo, complejo, asediado por sus demonios, capaz de cometer acciones terribles y, a la vez, seguir un código moral propio. Un villano que, sin embargo, se convierte en el héroe de la historia: un héroe que nunca se redime y para el que no hay salvación posible, porque, pese a todos sus triunfos, está condenado a ahogarse en su propia oscuridad.

Una familia con hambre de poder

Los Shelby gobiernan Birmingham, pero tienen hambre de poder y quieren más. A lo largo de cinco temporadas (de unos ocho capítulos cada una) seguiremos sus turbios negocios, su encarnizada lucha por ascender dentro del mundo del crimen, las facturas que tendrán que pagar para conseguirlo, los ascensos y declives de unos personajes magistrales, llenos de claroscuros (aunque siempre más oscuros que claros) y los enfrentamientos a enemigos temibles dispuestos a hacerlos caer.

No hay un minuto de respiro en la serie. Resulta imposible con los inesperados giros de unas tramas trepidantes que se mueven en todos los ambientes: desde las peligrosas calles de Brimingham a los salones aristocráticos, pasando por los despachos de los políticos y las fábricas donde emerge con fuerza el movimiento comunista. Un amplio retrato de la Inglaterra de los años 20, con todos los excesos y el brillo de la época y la oscuridad del submundo que sostenía ese vibrante tren de vida.

No quiero dejar de mencionar la importancia de las mujeres en la historia. Las Shelby son tan duras y luchadoras como los hombres de la familia y reclaman su lugar y su poder sin que les tiemble el pulso. La despiadada tía Polly es la otra cabeza del clan Shelby y el resto de las mujeres de la familia no se deja amilanar con facilidad. Todas ellas tienen voz propia y arrastran la misma oscuridad que los miembros masculinos del clan.

Excelente ambientación y una banda sonora de lujo

Me ha gustado todo en la serie: la historia, la forma en que está contada, la impecable ambientación, la fotografía y el trabajazo de los actores. Me quedo, sin duda, con la expresión impenetrable y los ojos de hielo de Cillian Murphy, que da vida a Thomas, el implacable jefe de la banda; y, por supuesto, con la grandísima Helen McCrory, recientemente fallecida, que interpretó a la dura matriarca de los Shelby y que va a dejar un enorme vacío en la próxima temporada.

No puedo dejar de mencionar la excepcional banda sonora de la serie, que incluye música de Radiohead, Artic Monkeys, Johnny Cash, The White Stripes, David Bowie... Música rock, grunge y punk que encaja como un guante con la oscuridad de la familia Shelby, sus turbios negocios y la suciedad de las calles de Birmingham. Todo un acierto.

¿Habéis visto la serie? Dejadme en los comentarios vuestras impresiones. ¡Me encantará conocer vuestra opinión!

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